El consumo de alcohol aumenta el riesgo de presentar seis tipos de cáncer. Cuanto más se consuma mayor será el riesgo de cáncer. Cuando se bebe alcohol, el cuerpo lo convierte en una sustancia química llamada acetaldehído. El acetaldehído daña el ADN y no le permite al cuerpo reparar el daño. El ADN controla el crecimiento y funcionamiento normal de las células. Cuando se daña el ADN, una célula puede comenzar a crecer sin control y formar un tumor canceroso.

La revisión de investigaciones epidemiológicas nos indica que las personas que usan alcohol y tabaco tienen un riesgo mucho mayor de presentar cáncer. Estudios recientes muestran la relación que tiene fumar marihuana con el desarrollo del cáncer de testículo. En un metaanálisis realizado por científicos de la Universidad de California se determinaba la influencia de esta droga, tan popularizada y mal interpretada, con la aparición de varios tipos de cáncer.

Estudio realizado en 2019 con entrevistas y encuestas a 275 pacientes que padecían diferentes cánceres y estaban ingresados en entornos hospitalarios, hemos encontrado un alto porcentaje de ellos, 87%, que reconocían haber sido consumidores habituales de alcohol y tabaco, y un 65% reconocían haber tenido vínculos con determinadas drogas como la marihuana o la cocaína. Tan solo un 18% declaraban no haber sido fumadores o bebedores y no tenían ninguna experiencia con drogas.

Es importante dar a conocer estos datos para prevenir el abusivo e irresponsable uso social que se hace de estas sustancias y conocer su peligrosidad.